LOS MEJORES ÁLBUMES INTERNACIONALES DE 2014

En Notodoesindie nos caracterizamos por un talante atemporal, sin embargo nos apetecía compartir con nuestros seguidores nuestras propias listas de 2014. Tras mostrar en días previos el Top 10 de mejores canciones de baile, nos ponemos serios y traemos los mejores álbumes internacionales. Son estos:

10. THE DRUMS «Encyclopedia»

The Drums se querían quitar la losa de su gran éxito “Let’s go surfing” y lo consiguen a medias con “Encyclopedia”. Por un lado es cierto que las canciones tienen estructuras elaboradas y el sonido, en general, no es tan inmediato aunque el conjunto funciona bien… Pero se han vuelto a sacar otro pepinazo con “Kiss me again”… ¡Y que lo sigan haciendo!

9. SHE & HIM «Classics»

¿Qué pinta un disco de versiones entre lo mejor del año? Pues mucho cuando se ejecuta como lo hacen She & Him que llevan perfectamente a su terreno a Dusty Springfield o Burt Bacharach. Es cierto que She & Him ya de por sí suenan a clásico y es por eso que todo cuadra. Ahora dicen que son el grupo estandarte del “Twee pop”, otra estúpida etiqueta. Hacen pop cuidado muy bonito y punto.

8. OWEN PALLETT «In Conflict»

Este violinista, productor y compositor canadiense ha sido una de las revelaciones de 2014, con un trabajo diferente incluso de lo que cabe esperar dentro del ámbito sonoro en el que se mueve. Difícil de catalogar, este conjunto de canciones son sobre todo pequeñas composiciones atmosféricas que predisponen una mente abierta, en blanco, lista para dejarse llevar. Recomendable escuchar este disco con una copa de buen vino, y cerrar los ojos.

7. REAL ESTATE «Atlas»

«Atlas» es un disco suave, perfecto para escuchar en el fin del verano. Sus temas son sencillos en apariencia pero complejos en lo profundo. Es un disco para ser escuchado con tranquilidad y se saborea aún más tras varias reproducciones. Incluye algunas joyas como «Navigator» o la instrumental «April’s Song».

6. THE NEW PORNOGRAPHERS «Brill Bruisers»

Melodías pegadizas, estribillos facilones con juegos vocales, sonido brillante, canciones de tres minutos… El pop de toda la vida pero muy bien hecho. ¿Qué más se puede pedir? Quizás un temazo excepcional, pues ahí lo tienes con “War on the East Coast”.

5. CARIBOU «Our Love»

Este es el disco de electrónica del año. «Can’t Do Without You» ya nos mostró de lo que este album sería capaz. Cuatro palabras que hipnotizan nuestro cerebro mientras la música hace lo propio con el cuerpo. Es un lujazo de disco que va desde la suave electrónica hasta el R&B.

4. ALT-J «This is All Yours»

Este disco de Alt-J se ha llegado a comparar con “Kid A” de Radiohead, lo cual no queda claro si es un elogio o un lastre con el que cargar… Lo cierto es que la referencia no va desencaminada con canciones que parece que no acaban de arrancar o ruiditos que parecen fuera de lugar, no obstante da la sensación de estar perfectamente medido, como la colocación del single “Left hand free” justo cuando la cosa parece que puede decaer, o esa ensoñadora “Warm Foothills” al principio de la segunda parte con coro a dos voces y silbidito incluido. El conjunto de lo más recomendable.

3. FOO FIGHTERS «Sonic Highaways»

Qué decir de un grupo que lo ha hecho todo y aún así son capaces de sacar un disco como éste; dirán que es más de lo mismo, ¿pero acaso iba Foo Fighters a hacer otra cosa? Sonic Highways es además un recorrido sonoro por el espectro musical estadounidense, ya que las ocho canciones fueron grabadas en un estudio de renombre diferente. Grohl decidió además crear una serie documental donde dejó constancia de las grabaciones y de su proceso creativo. Sin duda un valor añadido a esta joyita.

2. BECK «Morning Phase»

Cuando todo el mundo anda loco por hacernos bailar y colarse en la pista de baile llega el inquieto Beck y, como ya hiciera con el aclamado “Sea Change”, nos entrega este disco redondo lleno de brillantes medios tiempos y atmósferas reposadas.

1. THE WAR ON DRUGS «Lost in the Dream»

«Lost in the Dream» es el disco estrella del año. Desde el primer segundo entramos en la ensoñación que los norteamericanos nos proponen con «Under the Pressure». Pistas de larga duración cuidadas de principio a fin con momentos de absoluta perfección musical. «Red Eyes» conforma el punto más álgido. Tras este arrasador comienzo, el álbum mantiene un increíble nivel a través de canciones que, a través de una cuidada composición musical, adquieren vida propia.